martes, diciembre 29, 2009

¿Amor de madre?

Envié el texto siguiente a los diarios Levante-EMV e Información, de Valencia y Alicante, respectivamente, sin que hasta la fecha, salvo error, lo haya visto publicado.


¿Amor de madre?
Hay un artículo firmado por Gauden Vilas y titulado precisamente así, publicado en el día de hoy, 26 de diciembre, en su periódico, en el que el autor presupone por su cuenta cierta intencionalidad a María José Carrascosa y en la que además denigra a los jueces españoles. Lo cierto es que ella está pasando un calvario en la cárcel, con el fin de que no salga perjudicada su hija.
Dado que los jueces españoles fallaron a favor de ella debería haber sido el Estado Español el que se hiciera cargo de su defensa, eligiendo la estrategia más conveniente y contratando al abogado adecuado para el caso. Ella, desde la cárcel, poco margen de maniobra tiene. El Estado español defendería con ello el honor de los jueces españoles.
El juez Venezia, con su desorbitada condena, ha pisoteado a España, y ha demostrado que su intención no era la de hacer justicia, sino la de doblegar el ánimo de María José. Ni al juez Venezia, ni a Peter Innes parece que les importe mucho la suerte de la niña. Lo que desean es hundir a la madre, aunque para eso tengan que perjudicar de forma quizá irreversible a la hija.

3 comentarios:

migue dijo...

Creo que ella misma es la responsable de recibir una sentencia tan dura, al margen de otras responsabilidades que estén por encima de ella. Imagino que su desconocimiento de las leyes americanas siendo abogada española le ha llevado a esa situación. Y estoy seguro que sólo pensaba en el bien de su hija.

Vicente Torres dijo...

A una sentencia tan dura la ha llevado la brutalidad del juez Venezia, que ha pisoteado a los jueces españoles, y Peter Innes, que ha falsificado documentos, como está comprobado y verificado. El Venezia ha desestimado para el juicio las pruebas que ha querido.
Es un atropello en toda regla.
Por supuesto que MJ fue ingenua cuando se presentó voluntariamente. Cayó en una trampa mortal.

Mar dijo...

Yo no creo que ella misma sea la responsable de la sentencia, en esto, ella poco podía hacer. Creo más bien que las cartas ya estaban repartidas antes del juicio. Ha sido tratada como una de las peores criminales, con cadenas y candados como si estuviéramos en la edad de piedra cosa que no hacemos en este país con los delincuentes de EEUU.
El padre puede reirse ahora, pero el día de mañana su hija le pedirá respuestas del maltrato sufrido y no se que historia le contará. Es mejor dejarla sin padre y sin madre.
Esto es de todo menos amor a un hijo.